Que las casas rurales y bodegas tienen un estilo rústico muy marcado es algo que sabemos muy bien en Los Pinos Muebles de Las Rozas, en Madrid. 

Cuando hablamos de estilo rústico hacen acto de presencia materiales tan nobles como la madera, la forja, la piedra, el barro y las fibras naturales, surgiendo combinaciones decorativas cálidas y con mucho estilo. 

Precisamente el objetivo del estilo rústico, es lograr un ambiente relajado, campechano y tradicional a la par que confortable y que gire en torno a la naturaleza.
Dentro de este estilo se pueden distinguir varias tendencias como la colonial, la mediterránea o la country, pero todas comparten la base del ambiente rústico: la tranquilidad, la calidez y la armonía con el entorno natural. 

Como decíamos, los muebles suelen ser de madera de pino, porque proporciona solidez y fuerza. Las mesas auxiliares de cajones y las alacenas de madera en cocinas o salones son elementos muy comunes en un salón rústico. 

Es importante disponer de muebles que transmitan vida, historia y personalidad y que sean de calidad como los que disponemos en nuestra tienda. De esta manera podremos conseguir una decoración con verdadero aire rústico. También un mueble rústico ”vintage”, que ha pasado a través de generaciones en la familia nos puede ayudar a conseguir este objetivo. 

Pero la chimenea es, sin duda, la gran protagonista. Cuando pensamos en ella normalmente imaginamos una pared entera de piedra con detalles en madera. Otro tanto ocurre con las vigas de madera son un recurso muy utilizado y muy característico de este estilo. 

En la decoración rústica debemos tener cuidado porque la abundancia de adornos y complementos pueden recargar el espacio. No debemos perder de vista la búsqueda del equilibrio para no romper el efecto de relajación y tranquilidad que se desea transmitir, así como la simpleza y el orden. 

Por ello se eligen las fibras naturales como el hilo, el algodón, la lana o el lino para alfombras y cortinas de estampado liso, salvo el estilo rústico provenzal. Los sofás y otros muebles pueden incluir estampados naturales como los florales. Los colores más adecuados son aquellos que se inspiran en la naturaleza; los azules del cielo y del mar, los marrones de la tierra, los verdes de los árboles... Predominan los colores cálidos que, si son fuertes, se complementan perfectamente con las maderas más claras.
El barro y la piedra también son elementos típicos de este estilo, al igual que el bambú, el mimbre y el alambre. Procura utilizar objetos decorativos basados en estos materiales para conseguir ese efecto rural que buscamos. En la cocina la vajilla tradicional de cerámica y los cucharones de madera servirán de elementos decorativos.
Infaltable el hierro forjado, como la mejor opción para cabeceros, lámparas y espejos, así como las plantas, que servirán para adornar mesas, ventanas, muebles y rincones.. 

Para vestir las paredes utiliza cuadros de paisajes cercanos a la casa rural o bodega, así como fotografías familiares que transmitan humanidad y personalidad.